SINOPSIS Y REFLEXIONESPARASHÁ KI TISÁ #21
Parashá Ki Tisá #21 (Cuando censes) (3/6/2021) (Shabat Pará)
1: Shemot 30:11-31:17
2: Shemot 31:18-33:11
3: Shemot 33:12-16
4: Shemot 33:17-23
5: Shemot 34:1-9
6: Shemot 34:10-26
7: Shemot 34:27-35
Maftir: Bamidbar 19:1-22
Haftará: Iejezkel (Ezequiel) 36:16-36
CR: Hilel 20:27-22:46
La Parashá Ki Tisá (Cuando censes) viene premiada con una gran cobertura energética: Shabat Pará, que es posterior a Purín, tres semanas antes de Pesaj, y la semana anterior a Shabat Hakodesh. Ki Tisá nos habla del censo de los israelitas, y también del misterio que encierra el conteo de este empadronamiento. Veamos que nos dice la Torá:
“Hashem le habló a Moshe diciendo: cuando censes a los israelitas para establecer su número cada uno deberá entregar una contribución a Hashem como rescate de su alma, para que no haya ninguna plaga mortal entre ellos a causa del censo. Esto es lo que debe entregar todo aquel que sea censado: medio shékel.” Shemot (Éxodo) 30:11-13
Di-s ordenó no contar a las personas directamente por causa del mal de ojo (Ayim Hará) lo que causa enfermedades y mortandad. “Los israelitas fueron atacados de peste y murieron setenta mil hombres después de haber sido contados por el Rey David.” 2da de Shemuel 24:15
Moshe Rabenu realizó tres censos generales al pueblo de Israel: el primero al iniciarse la colecta para el santuario, al siguiente día después de Yom Kipur, en el desierto. El segundo censo después de la inauguración del Santuario, el 1o de Iyar, a los dos años de la salida de Egipto. Y el tercero fue después del suceso del Becerro de Oro y en el cual fallecieron 24.000 judíos.
¿Por qué Hashem le dice a Moshe Rabenu que Su pueblo no debe ser contado a dedo, sino por medio de un medio Shékel? La mitzva del medio shékel (majatzit hashékel) sirve de expiación por el pecado del Becerro de Oro. ¿Y por qué medio shékel y no un shékel entero? Porque el pueblo de Israel fue culpable de este pecado sólo durante medio día. Desde la séptima hora del día cuarenta desde que Moshe ascendiera a Di-s en el Monte Sinaí hasta esa noche - Di-s dijo: “Durante seis horas han venerado un ídolo mientras obtenían sustento de Mí.” Dicen nuestros sabios que pecaron medio día, por ello deben dar medio shékel (Talmud Ierushalmí Pea 2). La palabra shékel tiene el mismo valor numérico que la palabra nefesh (alma) cuyo valor es 430 y que al comprimirlo da 7 como resultado en ambas. Di-s ordenó al pueblo Israel entregar el medio shékel como herramienta para proteger y expiar su alma; es decir, mediante esta mitzva, el pueblo de Israel se inmuniza simbólicamente contra toda amenaza potencial de Amalek, suministrando el remedio antes que venga la enfermedad. El medio shékel es equivalente a diez guerá, es decir, un shékel son veinte guerás. De esta manera, esta moneda expiará por haber transgredido los diez mandamientos.
Pero Hashem como siempre y eternamente es bueno, creó una moneda de fuego de medio shékel de debajo de Su Kisé Akavod - debajo de Su trono de Gloria - y la mostró a Moshe diciéndole: Esto es lo que darán, similar a esto. (Talmud Ierushalmí, Shekalim 1:6) Dicho de otra manera, Hashem desvía la energía negativa provocada por causa del pecado del Becerro de Oro hacia la moneda, evitando de esta manera la mortandad masiva de Su pueblo. El medio shékel funciona más en términos cualitativos que cuantitativos, ya que ricos y pobres debían dar el medio shékel y no menos por ser pobres, o más por ser ricos...
“El buen camino que el hombre debe seguir es el buen ojo. El buen ojo es el que mira con benevolencia a Di-s, a Su Santa Torá y al prójimo; es decir, el que considera que todo lo que viene de Di-s es positivo, que todas las enseñanzas de la Torá están apoyadas en la absoluta verdad. El mal ojo es el mal camino, es aquel en que la persona lo mira todo con mal de ojo. Entonces todo le parece mal. Desaprueba la forma en que Di-s ha organizado el mundo e infringe ostensiblemente las leyes sagradas.” Pirket-Avot
Otro tema que podemos degustar y paladear es la exquisitez de la miel del panal de la Torá en este pasuk: Hashem le habló a Moshe, diciendo: “Mira, elegí a Betzalel, hijo de Urí, hijo de Jur, de la tribu de Yehudá, a quien colmé del espíritu de divinidad con sabiduría, inteligencia y ciencia, conocimiento y actitud creativa para toda clase de obra” Shemot (Éxodo) 31:1-3
Aquí vemos claramente como el Eterno en Su infinita bondad no escatima para repartir Sus dones y talentos a Sus hijos mortales. El arte, el arte regio, sólo desciende de lo Alto de Aquel que creó la existencia inagotable y que está en constante creación, Él sostiene el báculo del arte. Arte en el idioma hebreo es אמנות (amanút) y su código gemátrico es 497 que es igual a 2, y 2 alude a los dos mundos; el de arriba (Olam Habá) y el de abajo (la Tierra). Betzalel tenía el don de verlo todo proyectado en su mente, por causa de que el Eterno lo proyectaba en la mente del arte-sano, la de Betzalel, desde Su omnisciente Mente. Por tanto, no existe tal cosa como el arte regio sin la intervención de Di-s.
De tal manera que, hemos visto como el medio shékel representa la mitad del alma perdida por causa del pecado. Encarna el rescate de la otra mitad que es Hashem mismo, entonces, el alma que estaba fragmentada se reconecta nuevamente con la Shejiná. Al hacer la persona teshuváh (arrepentimiento) esa buena energía te perseguirá hasta que te alcance, y luego el arte danzará contigo al compas de un nuevo encuentro... ¡tú y Hashem!
“Y vendrán sobre ti y te alcanzarán todas estas bendiciones cuando obedecieres la voz del Eterno, tu Di-s ...” Devarim (Deuteronomio) 28:2
¡Shabat Shalom!
Por: Yehoshúa Villarreal I.
Con la autoridad del Rab Dan ben Avraham.
Es Licenciado en Filosofía y Letras de la Universidad del Zulia. Artista sinestésico que conjuga la música, la pintura y la literatura, cuyas obras están en museos como el MEAM-España, Museo Boca Raton-USA y el MACZUL-Venezuela. Graduado de la Escuela de Arte Julio Arraga y estudió en el Conservatorio de Música José Luis Paz en Maracaibo-Venezuela. Jazán de la comunidad B’nei Tzion de Miami.
Yehoshúa Villarreal I.
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